La tercera prueba del Circuito BTT La Ribera se corría este pasado domingo en Carlet, de modo que allá que nos fuimos Rober, Jorge y yo mismo (con el apoyo de Loreto).
A primera vista el perfil del recorrido no era demasiado radical, pero así como quien no quiere la cosa se tenían que conseguir algo más de 800 m de acumulado en los 43 km marcados.
9:30 de la mañana y salida hacia el Oeste del término municipal de Carlet, llaneando (picando hacia arriba) por asfalto hasta pasar el Canal del Júcar-Turia, donde se nos desvió por el camí de les Pedreres, ganando pendiente, en un intento de estirar el grupo de participantes de cara a evitar los primeros embudos.
Por desgracia no se consiguió. La primera zona de trialeras aparecía en el kilómetro 7, en principio sencilla para superarla dando pedales siguiendo el muy bien marcado camino por el que teníamos que ir. Puede ser por lo revirado del tramo, porque el terreno estaba húmedo debido a la lluvia caída por la madrugada, porque éramos mucha gente... Tocó esperar turno para enfilarla y el atasco continuó en el tiempo y en el espacio.
Pero al subir al camí del Tislar, abierto, todo se despejó. Y empezó a situar al grueso del grupo, porque era la primera parte continuada de subida (2,5 km casi al 6% de media) al que seguía el pedregoso y empinado descenso donde pudimos ver un rosario de bidones por el suelo y a los primeros participantes reparando pinchazos.
Poquito más de 1 km hacia abajo y, de golpe, la misma distancia hacia arriba. Esta fue la tónica en casi toda la marcha, muy rompepiernas... y nosotros poco a poco rodeando las faldas del puntal del Rascón remontando la Rambla de la Parra.
Se acercaba el temido Km 18. ¿Razón? Ver la ristra de bicicletas subir el camino de la Parra, cada cual afrontándolo según lo que llevara en las piernas, daba que pensar.
Subida de dos tramos, el primero de 900 m al 6% de media y el segundo, tras un pequeño descansillo, de 1 km al 9% de media, para alcanzar la cota más alta de la marcha: 354 m.
Os podréis imaginar cómo nos supieron los metros en los que podías dejar correr la bici que vinieron a continuación, aunque entre el barranco de Uchol y el de la Gitana, nos esperase una trialera resbaladiza, embarrada, de piedra rota que, en algún momento, hizo sacar el pie de la cala.
Volverían los dientes de sierra: primero subiendo por La Tramuntana bajando a la rambla de la Cova Foradada, luego afrontando un rampón hormigonado que nos conduciría a un tramo entre campos de cultivo antes de llegar a los últimos 800 m al 7% de media. ¿El premio? Haber llegado al kilómetro 28 donde el perfil ya apuntaba claramente hacia abajo.
Unos 5 km de bajada sin parones, con algunas curvas con sorpresa a la salida en forma de agua, sobretodo cuando rodábamos por la pedregosa rambla de la Parra.
Pero quedaba una sorpresa más, que no era otra que deshacer los 2 km de senda revirada y de terreno blando, que hicimos al principìo de la marcha. ¡Último esfuerzo! O casi, porque una vez las cubiertas tocaron el asfalto a la salida de la zona arbolada, quedaban los 4 km finales de llaneo hasta cruzar la línea de meta... y nadie quería perder lo ganado hasta ese momento.
Los tres llegamos prácticamente juntos, así que, con las bicis apoyadas en la pared llenamos el estómago con bocadillos y fruta mientras comentábamos las sensaciones que tuvo cada uno. Como se suele decir Tota pedra fa paret; todo suma para ir afinando...
Y no puedo terminar sin agradecer como siempre a nuestros patrocinadores Doyoubike, PACOM Systems, Talleres Gonzalo, Prosolutions y Edetania Personal Bankers, por todo el apoyo que nos dan.
Hasta la próxima.
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Si quieres ver todas las fotos de la marcha, las tienes en la galería.
Aquí puedes descargar el track de la marcha.
Crónica de Paco Pérez
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